Y saldrá el sol ... ( Parte 4 )

- ¡Corred,corred! Ahí hay un hueco y seguro nos podemos meter en primera fila.- Grita Miriam.

- Vamos... .- Dicen al unísono Óscar y Sara. 

- Aquí podremos ver todo bien y hacer alguna fotografía.- Comenta Miriam emocionada. -Sara, ya verás a Alan, ¡es muy guapo!

- Yo no sé qué le ven a mi primo, porque tenga los ojos azules y sea francés... Dice Óscar sin mucho entusiasmo, ya que siempre le ha tenido algo de envidia... Cuando Alan iba a España a veranear, todas las atenciones se las llevaba él.

  

 Sara permanece callada, tampoco es que le entusiasme mucho la idea del primo francés de ojos azules... Espera... "¿Ojos azules?"... Siente un escalofrío, e inmediatamente se quita la idea de la cabeza ... 

- ¡Ahí viene! ¡Alan, Alan! .- Anima Miriam dando palmas.

A Sara se le corta la respiración... "¡No puede ser! ¡Es él!"... Y justo cuando va a pasar por su lado, tropieza con su propio pie y cae delante de ella... 

Se quedan mirando... 

- ¡Vamos levántate que te alcanzan! .- Le alenta Sara... Enseguida Alan, se incorpora y sale corriendo como una centella.

- ¡Oh! Sara, luego dices que no tienes a los hombres a tus pies , jajaja .- Bromea Miriam.

- No haces gracia Miriam. - Espeta.

- Joder, ya estamos... No se puede hacer una broma. Y ha pasado el tiempo. Tienes que mirar hacia delante. 

Óscar y Sara se miran...  Desde que su hermana se lió con Pablo, la relación entre ambos tampoco ha sido de las mejores, aunque el no tuviera nada que ver.

Es medio día,entán en un bar céntrico tomando algo en una terraza, el buen día que hace lo permite . Entonces aparece Alan, recién duchado, desprende una aroma exquisito.

- Alan, te presento a Sara, la mejor amiga de Miriam, a ella la recuerdas ¿no? 

- Sí... Encantado, Sara.- Dice escuetamente. 

"Tan seco como la primera vez que lo vi". Piensa Sara... 

Entablan una conversación amena, entre risas, recuerdos, el por qué se ha adelantado Alan esta vez en su visita... Pero la mente de Sara está en otro lugar... 

- Ey, ¡baja de la luna! .- Le dice Miriam, a lo que ella responde con un saltito en la silla del susto. - ¿Qué te pasa? .- Dice en voz baja para que ellos, no se percaten.

- Nada, estoy bien. Lo único, que no pinto nada en ésta conversación ¿qué quieres que te diga? 

- De verdad, ya estabas rara antes, pero desde que lo has conocido,tela... ¿Te gusta?

- ¿Qué dices? ¡NO! No quiero tener nada que ver con esa familia, y lo siento por la parte que te toca. Y esta conversación se acaba aquí... .- Sara no sabe si está cabreada por la situación, o si tiene el típico bajón que le suele dar... Se levanta de golpe.

- Chicos, me tengo que ir. Un placer Alan. Miriam... Ya hablaremos tú y yo... Óscar, me la cuidas... adiós...

Deja sobre la mesa algo de dinero, se da media vuelta, abandona la terraza, y toma la calle con paso firme, no piensa mirar hacia atrás ...